Delirios de un Conspiranoico.

Los medios de comunicación cooptados y las Universidades cooptadas, han puesto de moda hace unos años llamar conspiranoicos a los que “elaboran teorías de conspiración” sobre los sucesos en el mundo. Esto quiere decir que inventaron un termino para denigrar a quienes ven los hechos desde un punto de vista critico que no es el mismo de la “gente normal”.

Tomamos como “gente normal” a los que creen sin discutir o investigar lo que llega a través de los medios de comunicación, leyes o normas que “forman opinión” o regulan la vida de las personas en su paso por el mundo.

Los ciudadanos "normales" creen en la democracia, la elección libre de los gobernantes, sus discursos y todas las noticias sobre el mundo. No se cuestionan sobre esta realidad. La gran mayoría es gente de buena fe. Si lo dice la tele, es verdad. Si habla un científico, es verdad. Si el político dice lo que quiere escuchar, es bueno. Nadie cuestiona.

Pero siempre existieron los que piensan diferente y sí cuestionan lo que ven o escuchan, los que evalúan consecuencias y se ponen a investigar lo que “está detrás o debajo” y, cuando lo comentan, se transforman en “conspiranoicos”, aunque también se los llame “anti sistema”. Así, es la historia.

Generalmente los jóvenes curiosos, los que están en la “edad de la rebeldía”, son los que se dedican a husmear el fondo de los hechos, los "antisociales", los "antisistema", los "perroflautas". Muchos de ellos se transforman en activistas , otros van creciendo en disconformidad con el sistema y se cuidan y cuidan a sus hijos tomando precaución en cuestiones como la formación de su sistema de pensamiento, su comida, su atención médica Etc., pero no son activistas. No lo consideran una causa por la cual luchar, sino en una forma de vida.

Hoy, los que sí, toman parte activa, salen con pancartas como: “NO HAY PAN PARA TANTO CHORIZO” o “NOS MEAN Y DICEN QUE LLUEVE” o “NO ES UNA CRISIS ES UNA ESTAFA” . Conocen de estos temas basándose en el estudio profundo de la situación actual, del ambiente y de los problemas socioeconomicos.

Ampliando el escenario a nivel mundial, a diferencia de épocas anteriores hoy muchos historiadores están sacando a la luz la verdadera historia del mundo y muchos científicos dan a conocer experimentos y conocimientos reveladores. Lógicamente el “aparato” que tanto costo armar y que domina al planeta se retuerce y aplica todo su esfuerzo por acallar a esta gente “rara” que va en contra de sus intereses.

El sistema ha cooptado a los gobernantes de muchos países que hasta crean guerras para mantenerlo, someten naciones, mantienen laboratorios, crean corporaciones para que dominen a la humanidad y no puedan emerger las pequeñas economías sin su permiso. Las noticias que escucha el mundo por los medios provienen de las cuatro agencias que las elaboran y son las únicas que pueden llegar al oído o vista de los ciudadanos del planeta. Los médicos trabajan para los laboratorios creando enfermedades. Las guerras son minuciosamente creadas para favorecer determinados propósitos. Hollywood esta al servicio de todo esto. Cada comida que se ingiere es más perniciosa que la anterior.

Mientras tanto, cada día hay mas drogas para los jóvenes, más música degradante y menos capacidad de elaborar pensamientos creativos.

A estas alturas. Sería interesante, por no decir urgente, que la población comience por lo menos a cuestionar algunas cosas que ve, oye o ingiere. También sería importante que se reviera la forma de vivir en libertad y de hasta donde somos capaces de elegir.

El término “conspiranoico” es un vocablo discriminatorio con el que se etiqueta a todo aquel que piense por si mismo y no esté de acuerdo con el relato oficial. Por esto que no discutiré sobre si es o no válido hablar en estos términos. Directamente afirmo que es una herramienta del poder para excluir a la persona inteligente y sagaz que se aparta del rebaño.